((((@)))) El ojO del Camaleón.

Los papeles se pierden, el disco duro corre el riesgo de infectarse con algún virus. Algo peor y bueno a la vez, las ideas se reproducen en la mente como roedores. Y -sin importar lo interesantes que pueden ser- son reemplazadas por otras y relegadas al olvido en cuestión de segundos. Antes de que todo esto pueda acontecer, emplearé este blog.

martes, noviembre 30, 2004

(SAN) ARAFAT: ¿UN NUEVO SANTO DE LOS MEDIOS EUROPEOS?

¿COMUNICADORES EUROPEOS Y SUS EMPRESAS COMPITEN CON EL VATICANO?
(DEBÍ HABER ESCRITO ESTO ANTES)

No, no existe ni San Yasser ni San Arafat ni San Abú Ammar (como era su nombre de batalla cuando joven). Y las ironías en este texto solo se remiten al título y a la bajada (aunque sería interesante usarla como recurso narrativo). Hablar de este personaje ya muerto como si fuera un héroe y paradigma de líder sería pecar de parcial o simplemente no conocer bien el otro lado de don Yasser y mucho menos este conflicto de Medio Oriente.

Arafat empezó siendo guerrillero y posteriormente, ya creada la OLP y reconocida por el mundo árabe como la única encargada de defender la causa palestina, su postura se desplaza paulatinamente hacia el campo político y diplomático. Sin embargo, el discurso de armonía y paz sería solamente para Reuters, BBC, AP y todo medio internacional (los europeos serían los que recogerían con más agrado este lado), porque dentro del pueblo palestino alimentaba el odio hacia el pueblo judío y nada hizo para desarmar a los movimientos extremistas palestinos. Hoy, a su muerte, estas serán las piedras en los zapatos de sus sucesores: Luchar contra una idiosincracia de las masas palestinas consistente en tirria visceral hacia todo lo judío (el discurso religioso y de superioridad racial fueron las armas para esto) y los grupos extremistas armados durante décadas, quienes son en su mayoría los autores de acciones terroristas.

La agonía de Arafat empezó siendo política, luego del fracaso de las conversaciones de Camp Davis y cuando ya a inicios del 2000 se le declaraba como la principal traba para un proceso de paz. Además se le exigía que responda ante la corrupción de la burocracia palestina y ante los 300 millones de dólares que abultaban sus cuentas bancarias. El ocasional silencio y una hoja con un supuesto presupuesto "en borrador" de gastos fueron sus únicas respuestas.

Habría que ser más objetivos al momento de informar. La muerte no debería limpiarle la cara sucia a cualquier personaje, por más trascendencia de este o por más que las preferencias personales del periodista inclinen la balanza. Resulta patético que medios tan serios suelten un "pero era tan bueno, qué lástima... fue un gran líder... todos tenemos algo de él..." cuando su único fin es informar con la verdad. No es que le desee la muerte, pero no quiero pensar qué pasará cuando muera Bush.